Hace pocos días vi esta película, la cual mi hermano me había recomendado hace tiempo y aunque dudo mucho de sus gustos la película me tenía bastante intrigado. Los Coristas, del director Christophe Barratier, es una historia basada en un hecho real, donde un profesor de música sin trabajo asume como celador (encargado del cuidado de los niños en la noche y profesor). La historia está ambientada en 1949, en un internado para niños problema o huérfanos cercano a algún pueblo de Francia.
Esta película tuvo nominaciones a la mejor película extranjera y a la mejor canción original, y con razón, la trama de la peli que se desarrolla contiene muchos elementos atemporales y que siguen siendo vigentes hasta el día de hoy. Lo primero que encuentra el Sr. Mathieu al llegar al internado es con niños que reciben duros castigos a causa de los severos métodos educativos del director, lo cual provoca una especie de relación de complicidad con los niños. El principio educativo del cual se jacta el Sr. Rachin, le director, se basa en la frase “Acción-Reacción”. Al poco andar, Mathieu descubre que puede atraer la atención de los niños a través de la música, por lo que decide formar un coro.
Justamente lo que logra el nuevo profesor es distraer a estos niños de entre 8 y 13 años de sus juegos y travesuras habituales, haciéndolos participar muy activamente del coro y logrando un nivel de respeto y admiración nunca antes visto en el internado. Hay muchos momentos cargados de emotividad, lo cual era muy fácil de comprobar estando junto con mi mamá y mi papá. Los miraba y estaban secándose las lágrimas. Yo mismo, que me considero más frío que campaña de Coyhaique ah wena!!, debo admitir que en varias ocasiones me dio pena. Por supuesto que me recupere rápidamente (…) y seguí atentamente el curso de la película.
